El 30 de marzo, tercer domingo de la Cuaresma, con la bendición de su Eminencia, Arzobispo Antonio, fue celebrada la Divina Liturgia en Saltillo por el reverendo Archimandrita Ignacio Samaán, con la participación de los fieles de dicha ciudad; algunos vinieron de Monterrey y de Torrión también. Miembros de la comunidad se encargaron maravillosamente del canto -en español y árabe- ellos que, muchos años atrás, formaban parte del coro de la Iglesia de san Nicolás en Bet-yala, Palestina.
En la homilía, el padre Ignacio alabó el esfuerzo que se está ofreciendo a favor de establecer la comunidad en Saltillo y de juntar a los fieles; el trabajo es difícil y a menudo no trae frutos inmediatos, pero cuando uno carga la cruz y sigue al Señor, la Gracia de Dios bedice la semilla ofrecida que dará frutos cien veces más: la Tradición de neustros Padres merece ser difundida en estas tierras generosas también.
La celebración se llevó a cabo en la capilla del convento de la congregación de San Juan Apóstol. Los padres del convento, con suma amabilidad, se dignaron prestarnos la capilla por tercera vez, y participaron con la feligresía en el convivio después de la Liturgia.
Cabe mencioar que la base de datos de los ortodoxos que están en Saltíllo y en las ciudades cercanas está creciendo día tras día, y esto nos da mucha alegría.