El día de Epifanía, 6 de enero, se lleva a cabo la ceremonia de la bendición de las aguas; a partir de este día los Padres visitan las casas de los feligreses para llevar a ellas “La bendición del Río Jordán”, eso es, el agua bendita que confirma la presencia del Señor en su hogar y en su vida. Amén.