Boletín del 04/12/2011

Memoria de Santa Bárbara y

de San Juan Damasceno

 

Himnos de la Liturgia

Tropario de Resurrección

Tono 8

icono_audioDescendiste de las alturas, oh Piadoso,
y aceptaste el entierro de tres días
para librarnos de los sufrimientos.
Vida y Resurrección nuestra, oh Señor, gloria a Ti.

Tropario de Santa Bárbara

Tono 4

Honraremos a Santa Bárbara, porque ella derribó las trampas del enemigo
y por el auxilio y la defensa de la Cruz ha escapado como un pajaro.

Tropario de San Juan damasceno

Tono 8

Oh guía de la recta fe, maestro de la devoción y dignidad,
astro del universo, belleza de los anacoretas inspirada por Dios,
san Juan Damasceno, que has iluminado a todos con tus enseñanzas,
oh lira del Espíritu: ¡Intercede ante Cristo Dios, para que salve nuestras almas!

Condaquio de la Navidad

Tono 3

Hoy la Virgen viene a dar a luz inefablemente,
en humilde gruta, al sempiterno Verbo. Gózate, oh universo,
al escucharlo; alaba, con las potestades y pastores,
a quien por voluntad se revela, al nuevo niño, al eterno Dios.

Lecturas bíblicas

Carta del Apóstol San Pablo a los Gálatas (3: 23 – 4: 5)

Hermanos: Antes de que llegara la fe, estábamos encerrados bajo la vigilancia de la ley, en espera de la fe que debía manifestarse. De manera que la ley ha sido nuestro pedagogo hasta Cristo, para ser justificados por la fe. Mas, una vez llegada la fe, ya no estamos bajo el pedagogo. Pues todos son hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús. En efecto, ustedes que han sido bautizados en Cristo, se han revestido de Cristo: ya no hay judío ni griego; ni esclavo ni libre; ni hombre ni mujer, ya que todos ustedes son uno en Cristo Jesús. Y si son de Cristo, ya son descendencia de Abraham, herederos según la Promesa.

Pues yo digo: Mientras el heredero es menor de edad, en nada se diferencia de un esclavo, a pesar de ser dueño de todo; sino que está bajo tutores y administradores hasta el tiempo fijado por el Padre. De igual manera, también nosotros, cuando éramos menores de edad, vivíamos como esclavos bajo los elementos del mundo. Al llegar la plenitud de los tiempos, envió Dios a su Hijo, nacido de mujer, nacido bajo la ley, para rescatar a los que se hallaban bajo la ley, a fin de que recibiéramos la filiación adoptiva.

Evangelio según San Lucas (13: 10-17):

En aquel tiempo, estaba Jesús un sábado enseñando en una sinagoga, y había una mujer a la que un espíritu tenía enferma hacía dieciocho años; estaba encorvada, y no podía en modo alguno enderezarse. Al verla Jesús, la llamó y le dijo: «Mujer, quedas libre de tu enfermedad.» Y le impuso las manos. Y al instante se enderezó, y glorificaba a Dios. Pero el jefe de la sinagoga, indignado de que Jesús hubiese hecho una curación en sábado, decía a la gente: «Hay seis días en que se puede trabajar; vengan, pues, esos días a curarse y no en día de sábado.» Le respondió el Señor: «¡Hipócritas! ¿No desatan del pesebre todos ustedes en sábado a su buey o su asno para llevarlos a abrevar? Y a ésta, que es hija de Abraham, a la que ató Satanás hace ya dieciocho años, ¿no estaba bien desatarla de esta ligadura en día de sábado?» Y cuando decía estas cosas, sus adversarios quedaban confundidos, mientras que toda la gente se alegraba con las maravillas que hacía.

Mensaje Pastoral

El día del descanso

Cristo cura a una mujer en «sábado» y se enfrenta a la dureza de los fariseos que le reclaman haber trabajado en el día del descanso. Una vez más rompe las reglas sabáticas, para curar a una mujer encorvada y, a la vez, la mentalidad enfermiza que desconoce la voluntad de Dios y malinterpreta el mandamiento divino: «Santifica el día del Shabat (descanso).»

La importancia del «Sábado» en el Antiguo Testamento debe su origen al recuadro de la creación definido en el libro de Génesis. Dios creó el mundo entero en seis días y, viendo que «todo era muy bueno», bendijo el día séptimo y lo consagró como el día del reposo, día en el cual Dios descansó, no de, sino en su buena obra.

A partir de esta comprensión, podremos acceder a la esencia del mandamiento «santifica el día del Sábado» y asimilar su sentido verdadero y profundo: no es un día para que descanse yo, sino principalmente que Dios descanse en mí como su buena creatura, es decir, santa. Enla DivinaLiturgia, la oración del Trisagio, que el sacerdote recita en voz baja, invoca al Señor: «Oh Dios Santo, que descansas en los santos…»

En nuestro «Shabat», que es el domingo (el día del Señor como lo significa la palabra en latín), nos dedicamos a todo lo santo, preparando el alma cual un tálamo adornado con virtudes: oración, caridad, mansedumbre, penitencia, serenidad, a fin de que sea digna de recibir al Señor de todo.

Cuando hablamos de la consagración de este día, no pretendemos contraponerlo a los demás días de la semana como no santos o inmundos; más bien el domingo será la fuente y el motor de santificación para todo el Cronos (el tiempo), ya que nuestra vocación es encomendar «nuestra vida entera a Cristo Dios», como entona el diácono en todas las letanías. Es una realidad tangible el hecho de que nuestro modo de vivir, intereses, ocupaciones y responsabilidades cotidianas, a menudo, nos hacen olvidar la meta principal; así que el domingo viene a recordarnos y a recalcar en nosotros la verdad que es ayer, hoy y para siempre: «Del Señor es la tierra y su plenitud, el mundo y los que lo habitan.» (Sal 24:1).

Desafortunadamente este icono sublime del día del descanso es muy ajeno al weekend que las sociedades «cristianas» conocen y practican. Sin embargo, la vida sincera de quienes «tienen oídos» no cesa de ser «voz que clama en el desierto: ¡preparad los caminos del Señor!»

Es el día del descanso: suspendamos las obras que impidan repose en nosotros el Señor. Es el día octavo, el objeto de toda la semana, de toda la vida, en el que el alma no quiere suspender, ni un instante, el clamor de san Juan el Teólogo: «¡Ven, Señor Jesús!» (Ap 22:20). Amén.

San Juan Damasceno

4 de octubre

Después de que la gran ciudad de Damasco, metrópoli de Siria, cayó ante los musulmanes en el año 635, los cristianos fueron sometidos a muchas desventajas y al pago de tributos a sus dominadores árabes. En el tiempo del Califa Abdul – Malek (685–705), todo lo que tuviera que ver con la población cristiana, era responsabilidad de Sergio Mansur, quién gozaba de la confianza del Califa y venía de una de las familias dominantes cristianas de la ciudad. Alrededor del año 675 nació un hombre sincero y temeroso de Dios, nuestro Santo Padre Juan, “el Arpa del Espíritu Santo”. Desde su infancia fue educado para entender lo grandioso de las virtudes de la limosna y de los actos de amor y caridad, debido a que su padre dedicó su riqueza para rescatar y liberar a los prisioneros cristianos. Juan creció e incrementó su sabiduría junto con su hermano Cosme (c.f. 14 oct.) quien habiendo perdido a sus padres, fue adoptado por Sergio. La educación de los niños fue confiada al monje Cosme, un erudito italiano que Sergio había rescatado de los árabes. Cosme los instruyó en filosofía y en todas las ramas del saber de su tiempo. Su viva inteligencia y su modesto comportamiento les permitió tener un rápido progreso, sobresaliendo especialmente en el arte de la poesía y la música. Así, al cabo de unos años, su maestro reconoció que no tenía más que enseñarles y obtuvo el permiso de su padre para retirarse a la Lavra de San Saba, donde deseaba terminar sus días.

Con un perfecto conocimiento del árabe así como del griego, Juan se unió a su padre en la administración, probando que era muy capaz, por lo que después de la muerte de Sergio, fue nombrado como su sucesor por el Califa Walid (705 – 715 ).

Cuando Leo III el Saurio (717 – 741 ) comenzó a atormentar a la Iglesia Cristiana en el Imperio Romano atacando la piadosa veneración de los santos iconos, San Juan lanzó una defensa vigorosa de la fe a través de sus muchas cartas que escribió en Damasco a sus corresponsales en el Imperio, estableciendo las bases teológicas de la veneración de los santos iconos como ha sido encontrado en las Sagradas Escrituras y en los escritos de los Santos Padres. De esta manera, Juan atrajo el odio de Leo, quién intento deshacerse de él por medio de una carta falsa en la cual Juan aparentemente le escribía al emperador sugiriéndole que se apoderara de Damasco. La carta fue mostrada al Califa quién estando furioso le ordeno a su consejero que lo privara de su mano derecha. Esa misma tarde Juan colocó su mano cortada ante el icono de la Madre de Dios y por varias horas le suplico con lagrimas a la Soberana del Mundo que le regresara su mano. Cayendo en un sueño ligero vio venir a la vida al icono y oyó que la Santa Madre lo consolaba. Al despertar se maravilló con la restitución de su mano derecha y a partir de ese momento hizo votos para dedicarse a alabar a la Madre de Dios y a Nuestro Salvador, y a defender la Santa Fe Ortodoxa. Renunció a su posición en la administración, distribuyó su fortuna y partió hacia Jerusalén con Cosme para convertirse en monje en San Saba.

El Abad de la Lavra puso a Juan bajo el cuidado de un Anciano experimentado en la virtud, áspero y demandante, quién le prohibió todo lo que tuviera que ver con filosofía, ciencias, poesía, cantos o lecturas, y le ordenó se dedicara él mismo sin quejarse de las tareas domésticas a fin de avanzar en la obediencia y humildad. Un día, sin embargo, pese a la prohibición de su Padre Espiritual, Juan se conmovió por las suplicas de alguien que había perdido a su padre y compuso para su consuelo un himno que se usa hasta nuestros días. Cuando su Padre Espiritual oyó de este acto de desobediencia le pidió a Juan que recogiera a mano toda la basura de la Lavra, lo cual hizo sin replicarle ni una palabra. Pero varios días después, la Madre de Dios se le apareció al Anciano y le pidió que desde entonces dejase a su discípulo componer himnos y poemas, los cuales podrían superar a los Salmos de David y las Odas de los Santos Profetas dada su belleza y dulzura

Juan, inspirado por el Espíritu Santo, como el dulce sonido de un arpa, dio voz, con intachable armonía a un gran numero de himnos que expresan la mas honda percepción teológica del Padre de la Iglesia: Escribió el canon que cantamos en Pascua y compuso la mayor parte del Octotonos de la Resurrección; también es autor de los maravillosos cánones y las sublimes homilías de muchas fiestas del Señor, de la Madre de Dios y de los Santos.

Además de sus dones poéticos, Dios también le dio la gracia de la expresión teológica. Sin añadir nada a los dogmas y a las doctrinas expresadas por los primeros padres como Gregorio el Teólogo, Basilio el Grande, Juan Crisóstomo, Gregorio de Niza y Máximo el Confesor, San Juan Damasceno, en un trabajo de tres partes titulado “La Fuente del Conocimiento”, parte de la esencia de la fe Cristiana con una claridad concisa y maravillosa de expresión, que el trabajo entero puede ser considerado como el sello y la gloria máxima de la gran era Patrística. La tercera sección “Sobre la Fe Ortodoxa” es un excepcional acontecimiento en la tradición cristiana y, para los cristianos ortodoxos, es la fuente mas fidedigna en todo lo concerniente a los dogmas de la Fe. Juan muestra los errores de las herejías que desvían a diestra y siniestra la sana doctrina del camino real que conduce a los cielos, especialmente en sus contribuciones a la lucha contra los iconos. En tres largos tratados, compuestos entre el 726 y el 730, claramente indicó los profundos planos teológicos y la necesidad de veneración de los santos iconos y reliquias, esto es una proclamación de la realidad de la encarnación del Hijo de Dios y de la edificación de nuestra naturaleza en la persona de los Santos. Habiendo adquirido verdadera sabiduría a través de la humildad y firmeza en las labores ascéticas, éste filósofo del Espíritu Santo se quedo dormido en la paz del Señor el 4 de diciembre de 749 (o 753). La cueva donde paso algún tiempo como anacoreta es venerada hasta el día de hoy en el Monasterio de San Saba.

Santa Bárbara (en árabe)

القديسة بربارة

 

Boletín del 27/11/2011

Memoria de San Andrés Apóstol

 
   Oh Andrés de memoria eterna:
  el Verbo sempiterno te encontró, oh Dichoso,
  y te mostró primer convocado entre los Apóstoles;
  y tú seguiste sus pasos, oh guía de los extraviados,
 que los enseñas la senda divina y celestial.

Himnos de la Liturgia

Tropario de Resurrección

Tono 8

audioDescendiste de las alturas, oh Piadoso,
y aceptaste el entierro de tres días para librarnos de los sufrimientos.
¡Vida y Resurrección nuestra, oh Señor, gloria a Ti!

Condaquio de Navidad

Tono 3

audioHoy la Virgen viene a dar a luz inefablemente,
en humilde gruta, al sempiterno Verbo.
Gózate, oh universo, al escucharlo;
alaba, con las potestades y pastores,
a quien por voluntad se revela, al nuevo niño, al eterno Dios.

Lecturas bíblicas

Carta del Apóstol San Pablo a los Efesios (2: 14-22)                         

Hermanos: Cristo es nuestra paz: el que de los dos pueblos hizo uno, derribando el muro que los separaba, la enemistad, anulando en su carne la Ley de los mandamientos con sus preceptos, para crear en Sí mismo, de los dos, un solo Hombre Nuevo, haciendo la paz, y reconciliar con Dios a ambos en un solo Cuerpo, por medio de la cruz, dando en Sí mismo muerte a la enemistad. Vino a anunciarles la paz: a los que estaban lejos y a los que estaban cerca. Pues por Él, unos y otros tenemos libre acceso al Padre en un mismo Espíritu.

Así pues, ustedes ya no son extraños ni forasteros, sino conciudadanos de los santos y familiares de Dios, edificados sobre el cimiento de los apóstoles y profetas, siendo la piedra angular Cristo mismo, en Quien toda edificación bien trabada se  eleva hasta formar un templo santo en el Señor, en Quien también ustedes están siendo juntamente edificados, hasta ser morada de Dios en el Espíritu.

Evangelio según San Lucas (18: 18-27)

En aquel tiempo, uno de los principales preguntó a Jesús: «Maestro bondadoso, ¿qué he de hacer para heredar vida eterna?» Le dijo Jesús: «¿Por qué me llamas “bondadoso”? Nadie es bondadoso sino sólo Dios. Ya sabes los mandamientos: No cometas adulterio, no mates, no robes, no levantes falso testimonio, honra a tu padre y a tu madre.» Él dijo: «Todo eso lo he guardado desde mi juventud.» Oyendo esto Jesús le dijo: «Aún te falta una cosa: Todo cuanto tienes véndelo y repártelo entre los pobres, y tendrás un tesoro en los cielos; luego, ven y sígueme.»

Al oír esto se puso muy triste, porque era muy rico. Viéndolo Jesús, dijo: «¡Qué difícil es que los que tienen riquezas entren en el Reino de Dios! Es más fácil que un camello entre por el ojo de una aguja que el que un rico entre en el Reino de Dios.» Los que lo oyeron dijeron: «Entonces, ¿quién se podrá salvar?» Respondió: «Lo imposible para los hombres, es posible para Dios.»

Mensaje Pastoral

Dura es la palabra de Dios

En la lectura evangélica de hoy, un joven vino a donde Jesús buscando «la vida eterna». Cristo le dijo con el corazón en la mano: «Todo cuanto tienes véndelo y repártelo entre los pobres, y tendrás un tesoro en los cielos; luego, ven y sígueme.» Se lo dijo porque supo que la riqueza fue para este joven –como lo es para muchos– un tropiezo en el camino. Luego dice Jesús a sus discípulos: «Es más fácil que un camello entre por el ojo de una aguja que el que un rico entre en el Reino de Dios.» Ellos se escandalizaron por la dureza de la palabra del Señor y, extrañados –al igual que nosotros–, dijeron: «Entonces, ¿quién se podrá salvar?» Y en otra ocasión, los discípulos le reclamaron: «Dura es esta   doctrina,   ¿quién   puede   escucharla?»     (Jn 6:60).

Cuando el joven le respondió a Jesús: «Todo eso (los diez mandamientos) lo he guardado desde mi juventud», Jesús no lo justificó, como hubiera hecho cualquier maestro dela Ley, ni lo alabó, sino que «lo amó» –nos informa exclusivamente el Evangelista Marcos (Mc 10:21)–, y «al que ama el Señor, disciplina» (Heb 12:7). Cristo amó al Joven rico y, por eso, le ofreció esta vocación, que no era tanto el «vende todo y repártelo a los pobres», sino  el «ven y sígueme». Jesús, en su plena sabiduría, supo que el apego a lo material le impedía seguir la vocación. 

Dice el Señor, por la boca del profeta Jeremías: «¿No es así mi palabra, como el fuego, y como un martillo golpea la peña?» (Jr 23:29). También dice: «He venido a arrojar un fuego sobre la tierra […] ¿Creen que estoy aquí para dar paz a la tierra? No, se lo aseguro, sino división.» (Lc 12:49-51). El camino que Cristo ofrece no se identifica con una religiosidad ligera que busca «paz» que acaricia nuestras emociones religiosas; Él no adorna las dificultades para que aparezcan atractivas, sino que llama a las cosas por su propio nombre.

La verdad es que una persona rica en su dinero, a menudo se preocupa por éste a tal grado que llega a considerarlo como el «salvador»; y sin darse cuenta, la abundancia de riquezas lo va empujando hacia la idolatría, de donde caerá. Jesús dispone como salida de esta trampa repartir y compartir la riqueza con los necesitados. Es cierto que uno solo no puede resolver los problemas de la pobreza en el mundo, pero sí todos –estemos donde estemos– nos topamos con pobreza. Entonces compartamos con los que necesitan de nosotros, en cuyo camino Dios nos ha puesto; que nuestra ayuda sea verdadera y efectiva y no simbólica. La virtud de esta acción es doble: quema la adhesión al dinero que está en mi interior, y con la caridad afirma el amor hacia mis hermanos.

Quizás esta práctica turba a uno si las riquezas lo tienen sometido, pero recordemos que la bondad y la salvación cristianas requieren de fatigas, esfuerzo, sacrificio y dominio de sí, porque la palabra de Dios es «como fuego, como un martillo que golpea la peña.»

El Apóstol Andrés, el Primer llamado

30 de Noviembre

El Apóstol de Cristo, Andrés, era hermano de Pedro pero a diferencia de éste eligió permanecer en castidad, abandonó todo lo que le sujetaba al mundo y decidió unirse al Bautista como discípulo. Como nos narra el Evangelio, cuando Andrés estuvo toda una tarde con el Maestro quedó convencido que Jesús era el Mesías y se apresuró a su casa y dijo a su hermano Simón: “¡Hemos encontrado al Mesías!”, y luego lo condujo a Jesús. Siendo el primero en reconocer a Cristo y en anunciarlo a Pedro. Andrés siguió al Salvador por los pueblos y las villas, desiertos o montañas, de forma que pudo beber de las profundidades del río de agua viva de sus palabras.

Por la intervención de Andrés el Señor multiplicó los panes. Fue a Andrés que Felipe acudió cuando unos griegos le pidieron ver a Jesús. Recibió la plenitud de la Gracia del Espíritu Santo en Pentecostés y predicó el Evangelio alrededor del Mar Negro y en Grecia. Enfrentó peligros y tribulaciones sinnúmero, enfermedades, maltrato y toda clase de privaciones; pero el Espíritu Santo le acompañó siempre y habló por su boca, obró milagros y curaciones, y le dio paciencia y regocijo en sus pruebas. Este poder de Dios en él le permitió conducir a multitudes a la fe, a iluminar sus mentes por su prédica. Trajo almas a un segundo nacimiento a través del Santo Bautismo; ordenó sacerdotes y consagró obispos, construyó iglesias y organizó la alabanza a Dios dentro de ellas.

En Patras, Andrés sanó a la esposa del Procónsul de una enfermedad incurable y la atrajo a la fe al igual que a muchos habitantes del lugar. También convirtió al hermano del mismo procónsul  con lo que los logros del cristianismo en este territorio se hicieron muy grandes y provocaron el enfurecimiento del gobernante quién hizo arrestar al Apóstol. Días después el Santo fue sumariamente condenado a ser crucificado cabeza abajo. Luego de tranquilizar a los amigos que pedían su libertad, San Andrés bendijo por última vez y entregó su alma a Dios. 

En 357 las preciosas reliquias del Apóstol se llevaron de Patras a Constantinopla y colocadas junto con las de San Lucas y Tadeo en la Iglesia de los Santos Apóstoles.

NOTICIAS

Avances en la Catedral de San Pedro y San Pablo

Gracias a los buenos oficios y la amorosa supervisión de Sayedna Antonio, se pueden ya constatar importantes avances enla Catedral de San Pedro y San Pablo en todos los ámbitos … (más)

S.E. Arzobispo Antonio regresa del Patriarcado

Su Eminencia Metropolita Antonio Chedraoui, Arzobispo de nuestra Arquidiócesis regresó el 15 de noviembre de su viaje al Patriarcado después de participar en la reunión del Santo Sínodo Antioqueno en el monasterio de nuestra Señora de Balamand, en Líbano (Véase el comunicado del Santo Sínodo).

Además, Su Eminencia encabezó una comité de cuatro Arzobispos, miembros del Santo Sínodo, a Kuwait, donde junto con el Arzobispo Constantino Papastifanou, Arzobispo de Bagdad y de Kuwait y del Golfo Árabe, visitaron al Primer Ministro, el Jeque Naser Muhamad Al-Sabah. La visita dio muchos frutos en un ambiente lleno de atención y claridad. Su Eminencia Arzobispo Antonio expuso la situación de la Iglesia Ortodoxa de Antioquía en Kuwait, extrañando que hasta ahora no hubiera un permiso oficial para nuestra Iglesia Ortodoxa conocida por su nacionalismo, y solicitó a Su Excelencia Príncipe Sabah una solución que correspondiera a la dignidad de la Iglesia. El Príncipe ofreció una respuesta favorable y amable y dio sus instrucciones para facilitar el proceso.

También Su Eminencia estaba presente en todo el protocolo de la recepción de Su Santidad, Kiril I, Patriarca de Moscú y de Toda Rusia, que se llevó a cabo del 12 al 15 del mes en curso. El domingo 10 de noviembre Su Eminencia participó en la Liturgia pontifical presidida por Su Santidad junto con Su Beatitud, Patriarca Ignacio IV, con la participación de Sus Eminencias arzobispos del Santo Sínodo. La visita del Patriarca ruso cumple con el protocolo de las visitas del Su Santidad a los patriarcados  ortodoxos después de su consignación patriarcal, además como un gesto de apoyo y de oración a favor de la paz y de la armonía en el Medio Oriente donde los cristianos tiene una relación muy estrecha y fervorosa con los cristianos de Rusia.

Damos la bienvenida a Su Eminencia, nuestro Padre y Pastor, al arribar a su Sede deseándole muchos años llenos de salud, predicando la palabra de la verdad.

Avances en la Catedral de San Pedro y San Pablo

Gracias a los buenos oficios y la amorosa supervisión de Sayedna Antonio, se pueden ya constatar importantes avances enla Catedral de San Pedro y San Pablo en todos los ámbitos. Los trabajos iconográficos avanzan con rapidez. El equipo de iconógrafos encabezado por el Maestro  Arturo Ruvalcaba  ha completado ya la iconografía del Santuario. En él pueden apreciarse hermosos iconos, como el de la Santísima Trinidad, la Theotokos Platitera en el ábside, Cristo Sumo Sacerdote en la Cátedra, en los altares laterales y la prótesis pueden verse los iconos de la Natividad del Señor, Cristo el Novio, santos místicos como San Andrés de Creta y San Nectario, y los santos Apóstoles, además de los iconos de nuestros Padres los Santos Jerarcas y Doctores, San Gregorio, San Basilio y San Ignacio.

Ahora, el equipo continúa la labor en la cúpula, donde se escribirá el icono de Cristo Pantocrátor ,  y en el muro norte, (donde ya puede verse a San Rafael Hawaweeny de Brooklyn, el único santo ortodoxo que ha pisado suelo mexicano).

Simultáneamente con el trabajo iconográfico dentro del templo, se ha seguido adelante en los trabajos de los jardines, emparejando el terreno y rellenando buena parte del barranco aledaño a la terraza sur.

Además de los avances logrados en el aspecto arquitectónico, la Catedral ha tenido avances también en lo referente al trabajo pastoral que, bajo la dirección y supervisión de nuestro Padre y Arzobispo Antonio, están realizando el Archimandrita Andrés Marcos y el Padre Emiliano Díaz.

Desde la Misa Solemne del 16 de octubre, cada domingo se está celebrando la Divina Liturgia de 11:30 a 12:30 del día, y luego, como es tradición en nuestra Iglesia, el clero y los fieles pasan a la casa parroquial, donde se toman un café, platican y conviven.  También  se ha creado un grupo de damas que celebra el oficio de los Ruegos a la Virgen (Paráclesis) los miércoles a las 10:00 a.m.

Actualmente se ha  iniciado la formación de un coro infantil, para lo cual se contará con una clase semanal de música para los niños que quieran participar.

Pero no sólo Sayedna y los padres trabajan en Catedral: Sayedna Antonio ha fundado un Comité Parroquial, que con la intención de convocar a las familias ortodoxas a reunirse en torno a la Iglesia, está organizando con mucho entusiasmo una Gran Posada para el día 11 de diciembre, que tendrá lugar en los terrenos de Catedral al terminar la Divina Liturgia, y a la cual están todos cordialmente invitados.

Aparte del trabajo en San Pedro y San Pablo, los padres Andrés y Emiliano están  visitando a las familias ortodoxas de la zona, con la finalidad de conocerlas y ponerlas al tanto de los servicios que se ofrecen en la nueva catedral. Al mismo tiempo, estas visitas sirven para conocer las necesidades específicas de cada familia para atenderlas mejor. Por ello, los padres sugieren a los miembros de las familias invitar amigos a la casa el día de la visita, de forma que surjan más ideas e inquietudes. Para estas visitas a las casas, los padres pueden preparar charlas sobre temas bíblicos o eclesiásticos que le interesen a las familias o a sus amigos.

Aquellos que estén interesados en recibir la visita de los padres en sus casas pueden solicitarlo llamando al teléfono de la Catedral: 5304-8257, o escribiendo un mensaje a  catedral@iglesiaortodoxa.org.mx . Inviten a sus familiares y amigos. Esperamos sus mensajes.

Sayedna Antonio en San Pedro y San Pablo

Este domingo 20 de noviembre, S.E. Sayedna Antonio Chedraoui presidió en la Catedral de San Pedro y San Pablo su primera Divina Liturgia en México después de su visita al Patriarcado de Antioquia.

Durante la homilía, Sayedna Antonio explicó  el Evangelio del día, recordándonos que el legado más importante que se puede dejar a los hijos es el Amor, y que los bienes materiales no deben esclavizarnos.  Resaltó también la importancia de la evangelización de los jóvenes como una labor de las familias y dela Iglesia, ya que los jóvenes son los padres de familia del mañana, los formadores en la Fe de las futuras generaciones.  También invitó a los  niños a participar en el coro infantil que se está formando como parte del esfuerzo pastoral que él dirige en la Catedral de San Pedro y San Pablo. Aprovechó la ocasión para invitar a todos los fieles y amigos a la posada parroquial que se celebrará en esa Catedral el domingo 11 de diciembre después de la Liturgia.

Al finalizarla Liturgia, Sayedna invitó a los asistentes a tomar café en la casa parroquial, donde convivió y departió con los feligreses, respondiendo a las dudas y comentarios que surgieron en torno a la ortodoxia, la iglesia, y otros temas.

Cuando se le preguntó sobre las relaciones  de la iglesia ortodoxa con la católica romana, Su Eminencia respondió que las relaciones con nuestra iglesia hermana son muy buenas, y resaltó la importancia de la unión entre ellas para hacer frente común al flagelo de las sectas y los grupos anticristianos.

Antes de retirarse, Sayedna supervisó los avances de la obra de los jardines, y entregó al Rector,  Archimandrita Andrés Marcos diversos artículos religiosos que trajo del Patriarcado para el uso dela Catedral.

Gracias, Sayedna Antonio por el cariño y el empeño que ha puesto en el proyecto de la nueva Catedral de San Pedro y San Pablo. Tenga la certeza de que su esfuerzo ha comenzado a dar frutos.

Boletín del 20/11/2011

Fiesta de la Presentación

de la Madre de Dios en el Templo

Alabemos con fe a María, la doncella de Dios,
a quien los profetas, antiguamente, habían llamado:
 jarra, tabla de la ley, vara y monte intocable.
Pues hoy es presentada en el Santo de los Santos para ser educada para el Señor.

Himnos de la Liturgia

Tropario de la Resurrección

Tono 6

audioLos poderes celestiales aparecieron sobre tu sepulcro;
y los guardias quedaron como muertos;
María se plantó en el sepulcro buscando tu Cuerpo purísimo.
Sometiste al Hades sin ser tentado por él;
y encontraste a la Virgen otorgándole la vida.
¡Oh Resucitado de entre los muertos, Señor, gloria a Ti!

 

Tropario de la Presentación de la Virgen en el Templo

Tono 4

Hoy es el preludio de la complacencia de Dios,
el anuncio de la Salvación para los hombres:
la Virgen se presenta en el Templo de Dios
y preanuncia a Cristo a todos.
Exclamémosle con gran voz diciendo:
«¡Alégrate, oh cumplimiento del Plan salvífico del Creador!»

Condaquio de la Presentación de la Madre de Dios en el Templo

Tono 5

 Sagrado Templo del Señor y purísimo,
preciosa cámara nupcial y santísima,
cofre venerable de la Gloria de Dios,
en la casa del Señor, la Virgen hoy es presentada y con ella la gracia del Espíritu Divino.
 Alábenle los ángeles de Dios porque ella es la tienda celestial.

Lecturas bíblicas 

Carta del Apóstol San Pablo a los Efesios (2: 4-10)

Hermanos: Dios, rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun cuando estábamos muertos por los pecados, nos vivificó juntamente con Cristo —por la Gracia han sido salvados— y con Él nos resucitó y nos hizo sentar en los cielos en Cristo Jesús, a fin de mostrar en los siglos venideros la sobreabundante riqueza de su Gracia, por su bondad para con nosotros en Cristo Jesús. Pues por la Gracia han sido salvados, mediante la fe; y esto no viene de ustedes, sino que es un don de Dios; no viene de las obras, para que nadie se gloríe. En efecto, hechura suya somos: creados en Cristo Jesús, en orden a las buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano para que en ellas anduviéramos.

Evangelio según San Lucas (12: 16-21)

Dijo el Señor esta parábola: “Los campos de cierto hombre rico dieron mucho fruto; y pensaba para sí diciendo: “¿Qué haré, pues no tengo dónde reunir mi cosecha?” Y dijo: “Voy a hacer esto: Demoleré mis graneros y edificaré otros más grandes, y reuniré allí todo mi trigo y mis bienes; y diré a mi alma: Alma, tienes muchos bienes en reserva para muchos años. Descansa, come, bebe, goza.” Pero Dios le dijo: “¡Necio! Esta misma noche te reclamarán el alma; las cosas que preparaste, ¿para quién serán?” Así es el que atesora riquezas para sí, y no se enriquece en orden a Dios.»

Mensaje Pastoral

El Paraíso: ¿verdad o ilusión?

«¡Descansa, come, bebe y goza!»

Con estas palabras el rico de la parábola se felicitaba así mismo. ¿Acaso dicho estado no es «el paraíso perdido» del lenguaje mitológico –descanso, satisfacción y placer–, paraíso anhelado por muchos? El hombre de hoy planea: trabajaré fuertemente en la juventud para descansar y disfrutar de mis últimos años (¡como si supiera el momento preciso de su partida!). Sinceramente nuestro modo de pensar a menudo es muy parecido al del rico de la parábola.

¿Por qué las palabras de Jesús califican de ignorante nuestra actitud respecto a la búsqueda de este paraíso: «¡Necio!»? Para Sigmund Freud, padre del psicoanálisis, «el paraíso perdido» es una añoranza –que se ubica en la subconciencia– hacia el estado del feto en la matriz, donde la creatura come, bebe y descansa incesablemente. La hipótesis del psicoanalista logra, en cierto modo, trazar un perfil de la verdad: los anhelos religiosos no son obra de la civilización sino reacción genuina de la naturaleza humana; pero lo añorado no es el seno materno sino «el regazo de Dios», del cual el hombre ha abortado a sí mismo. Lo que Freud llama «subconciencia» la Biblia denomina «corazón» y la filosofía griega, adoptada por los padres de la Iglesia, le designa como νοός «Noos»: el ojo espiritual del ser humano por cuyo medio se comunica con su Creador y lo busca; es lo que le privilegia como la creación amada de Dios. El hombre, en la comprensión cristiana, no es un animal social ni racional sino un ser litúrgico. La etimología da este sentido a la palabra griega άνθρωπος «ántropo»: el que puede mirar hacia arriba. Físicamente su constitución –ya que puede estar de pie– le posibilita observar cómodamente el cielo; así también su «memoria paradisíaca» le permite añorar lo alto y lo divino. Si bien la mitología de la antigüedad ha adulterado esta nostalgia con las pasiones carnales del mundo caído, la revelación bíblica –culminada con la Encarnación del Hijo de Dios– ha purificado la añoranza y ha devuelto al paraíso su sentido esencial como estado de convivencia con el Señor: «el Reino de Dios ya está entre (en) ustedes» (Lc 17:21). La necedad del rico de la parábola consiste en que desactivó esta memoria. Sus graneros gigantescos le taparon la vista y ya no advertía más allá de su vida mundana.

Un placer –dice un filósofo– se vuelve dolor cuando te adviertes de que acabará pronto: ahora comes, al rato tendrás hambre; descansas, luego te cansarás o padecerás enfermedad. No era así con Adán en el
Paraíso. Su permanencia con Dios garantizaba su permanencia en la dicha.

La Iglesia, como voz que clama en el desierto, no cesa de reavivar en nosotros la memoria del «Reino de Dios» como anhelo constante y criterio básico de nuestro pensamiento, sentimiento y actitud. Cuando el cristiano llena sus sentidos y los espacios de su vida con la Palabra de Dios, la Gracia obra en él mística e imperceptiblemente, transformando su subconciencia añorante en una conciencia verídica, y he aquí que se vuelve iniciado del Paraíso restaurado. Amén.

La presentación de la Madre de Dios en el Templo

21 de noviembre

Esta fiesta de la Virgen se atribuye en el Oriente, más o menos, al Siglo VII, mientras en el Occidente al siglo XIV. Se caracteriza la fiesta por una historia que tiene un sentido muy profundo.

La pareja virtuosa, Joaquín y Ana, siendo estéril, fue agraciada por Dios con el fruto del vientre: María. Cuando la llevaron al Templo donde iba a residir la niña de tres años, conforme a la promesa que habían dado, Joaquín llamó a unas hebreas vírgenes para que la acompañaran con lámparas. María los adelantó sin ningún temor o vacilación y, al llegar al atrio del Templo, se encontró con Zacarías, el sumo sacerdote, y se aventó a sí misma en sus brazos mientras él decía: “El Señor te glorifica en toda generación, pues he aquí que en ti, Dios revela en los últimos días la salvación preparada para su pueblo.”

Luego, a diferencia con los hábitos conocidos, Zacarías introdujo a la niña María en el Santo de los Santos –parte del Templo inaccesible a ninguno excepto el mismo sumo sacerdote que entraba una vez al año para ofrecer un sacrificio por los pecados del pueblo– y la asentó en el tercer escalón del Altar; la Gracia del altísimo descendió sobre ella, así que empezó a bailar de alegría. Todos los presentes glorificaron a Dios por todo lo que hubo de realizarse en esta niña.

Joaquín y Ana regresaron a su casa pero sin la niña. Ella permaneció en el Templo nueve años, asimilando lo celestial, sin preocupación ni pasión; las mismas necesidades de la naturaleza las superó, al igual que todos los deseos materiales, vivió totalmente para Dios, contemplando su hermosura. Con constante oración y vigilia, se transformó en un espejo que refleja la gloria de Dios. Con una mente purificada por el recogimiento y el ayuno, pudo sondear la profundidad de las Santas Escrituras y comprendió que todo el pasado tiempo era necesario para que Dios preparase para sí una madre elegida dentro de esta rebelde humanidad.

María entró en el Templo, y allá contuvo a Dios; el Templo ya es ella; ella es la Tienda, el Tabernáculo de la Nueva Alianza, la Jarra del Maná celestial, la vara de Aarón y la Tabla de la ley de la Gracia.

NOTICIAS

S.E. Arzobispo Antonio regresa del Patriarcado

Su Eminencia Metropolita Antonio Chedraoui, Arzobispo de nuestra Arquidiócesis regresó el 15 de noviembre de su viaje al Patriarcado después de participar en la reunión del Santo Sínodo Antioqueno … (más)

Recepción a S.E. Obispo Ignacio en Valencia

El viernes 11 de noviembre, Su Excelencia, Obispo Ignacio Samaán llegó a la ciudad de Valencia, Venezuela, en su primera visita pastoral a dicha ciudad… (más)

Cosagración episcopal: dos obispos auxiliares en Sao Paolo

El domingo 6 de noviembre, se llevó a cabo en la Catedral patriarcal, en Damasco, la consagración episcopal de Sus Ecelencias, Monseñor Romanos Daoud y  Monseñor Marcos El-Khoury, como obispo auxiliares … (más)

 

 

Recepción a S.E. Obispo Ignacio en Valencia استقبال في رعية فالنسيا

El viernes 11 de noviembre, S. E. Obispo Ignacio Samaán llegó a la ciudad de Valencia, Venezuela, en su primera visita pastoral a dicha ciudad. Lo recibió en la iglesia de San Jorge, el Reverendo Archimandrita Gerásimos Hazim junto con la feligresía. Después del Servicio de Acción de gracias todos se dirigieron al salón de la iglesia.

Acompañó a Su Excelencia el reverendo Archimandrita José Dib, y participaron en la recepción el Vicario episcopal de la Iglesia Católica Romana, Monseñor Tulio González y el Rev. Padre Evángelos Zapata, párroco de la Iglesia Ortodoxa Griega.

En su discurso, el Sr. Yorgaki Fursa dio la bienvenida a Su Excelencia, luego recordó la ceremonia de la consagración episcopal con su triple expresión “¡Es digno!” mientras los presentes respondían con lo mismo. Sayedna Ignacio dio las gracias a todos por la recepción tan cálida, y consideró que el saludo “¡es digno!” que acababa de escuchar “no es nada más un privilegio que me honra sino también una responsabilidad sobre la cual tengo que dar respuesta algún día: ¿Has hecho que la palabra de Dios esté en la boca, en la mente y en el corazón de tus hijos?”

Los reunidos participaron en un ágape en un ambiente familiar lleno de alegría.

وصل صاحب السيادة الأسقف إغناطيوس سمعان إلى مدينة فالنسيا، فنزويلا، في 11 تشرين الثاني الجاري في زيارة رعائية هي الأولى له في هذه المدينة. كان في استقباله في كنيسة القديس جاورجيوس قدس الأرشمندريت جراسيموس هزيم، راعي الكنيسة،
مع أبناء الرعية . بعد صلاة الشكر توجه الجميع إلى صالون الكنيسة.

رافق صاحب السيادة قدس الأرشمندريت جوزيف ديب، وشارك في الاستقبال الوكيل الأسقفي للكنيسة اللاتينية مونسنيور توليو غونسالس، وقدس الأب إفانغيلوس ساباتا راعي الكنيسة اليونانية في فالنسيا.

بعد كلمة رئيس الجمعية السيد يورغاكي فرصة والتي رحب فيها بصاحب السيادة واستحضر خدمة السيامة الأسقفية صارخاً مع تجاوب أبناء رعية فالنسيا “مستحق”، شكر الأسقف بدوره كل الحضور على حفاوة استقبالهم، ورأى أن هتافهم “مستحق”: “ليس كرامةً أتشرف بقبولها  فحسب بل هو قبل كل شيء مسؤولية سأُحاسبُ يوماً بشأنها: هل وُفِّقتَ في أن تجعل كلمةً الله على لسان أبنائك وفي عقولهم وقلوبهم؟”

ثم اشترك الجميع في مائدةِ محبة في جوٍّ من الإلفةِ والتعارف.

Cosagración episcopal: dos obispos auxiliares en Sao Paolo

El domingo 6 de noviembre, se llevó a cabo en la Catedral patriarcal del Mariamiye en Damasaco, por impocisión de manos de Su beatitud Ignacio IV, Patriarca de Antioquía y de Todo el Oriente junto con Sus Eminencias Arzobispos y miembros del Santo Sínodo Antioquen: la consagración episcopal de Sus Ecelencias, Monseñor Romanos Daoud y  Monseñor Marcos El-Khoury, como obispo auxiliares de S.E. Metropolita Damaskinos Mansour, Arzobispo de Sao Paolo y de toda Brasil.

Cabe mencionar que la presente consagración es la última en la serie de las 12 consagraciones episcopales que se han llevado a cabo a partir de la decisión del Santo Sínodo en junio 2011.

Damos la bienvenida a Sus Exelencias en América Latina deseánoles un Ministerio lleno de alegría, paz y éxito en el Señor.

Boletín del 13/11/2011

Memoria de San Juan Crisóstomo

Himnos de la Liturgia

Tropario de Resurrección

Tono 5icono_audio
Al coeterno Verbo, con el Padre y el Espíritu,
al Nacido de la Virgen para nuestra salvación,
alabemos, oh fieles, y prosternémonos.
Porque se complació en ser elevado en el cuerpo sobre la Cruz
y soportar la muerte,
y levantar a los muertos por su Resurrección gloriosa.

Tropario de San Juan Crisóstomo

Tono 8

La Gracia que por tu boca resplandeció como fuego,
ha iluminado el universo,
ha revelado al mundo los tesoros de la pobreza
y ha mostrado la excelsitud de la humildad.
¡Oh padre Juan Crisóstomo, cuyas palabras nos han educado,
intercede ante el Verbo, Cristo Dios, para que salve nuestras almas!

Condaquio de la Presentación de la Madre de Dios en el Templo

Tono 5

 Sagrado Templo del Señor y purísimo,
preciosa cámara nupcial y santísima,
cofre venerable de la Gloria de Dios,
en la casa del Señor, la Virgen hoy es presentada
y con ella la gracia del Espíritu Divino.
 Alábenle los ángeles de Dios porque ella es la tienda celestial.

Lecturas bíblicas

Carta del Apóstol San Pablo a los Hebreos (7: 26-8:2)

Hermanos: Así es el Sumo Sacerdote que nos convenía: santo, inocente, inmaculado, apartado de los pecadores, encumbrado por encima de los cielos, que no tiene necesidad de ofrecer sacrificios cada día como aquellos sumos sacerdotes, primero por sus pecados propios, luego por los del pueblo: esto lo realizó de una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo. Es que la Ley instituye como sumos sacerdotes a hombres frágiles; pero la palabra del juramento —posterior a la Ley— instituye al Hijo perfecto para siempre.

Éste es el punto capital de cuanto venimos diciendo: tenemos un Sumo Sacerdote tal, que se sentó a la diestra del trono de la Majestad en los cielos, ministro del santuario y del Tabernáculo verdadero, erigido por el Señor, no por un hombre.

Lectura del Evangelio según San Lucas (10: 25-37)

En aquel tiempo, se levantó un legista y le dijo a Jesús para ponerlo a prueba: «Maestro, ¿qué he de hacer para heredar vida eterna?» Él le dijo: « ¿Qué está escrito en la Ley? ¿Cómo lees?» Respondió aquél: «Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo.» Entonces le dijo: «Bien has respondido. Haz eso y vivirás.» Pero él, queriendo justificarse, dijo a Jesús: «Y ¿quién es mi prójimo?» Jesús le respondió y dijo: «Bajaba un hombre de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de salteadores que, después de despojarlo y golpearlo, se fueron dejándolo medio muerto. Casualmente, bajaba por aquel camino un sacerdote y, al verlo, dio un rodeo. De igual modo un levita que pasaba por aquel sitio lo vio y dio un rodeo. Pero un samaritano que iba de camino llegó junto a él, y al verlo tuvo compasión; se acercó y vendó sus heridas echando en ellas aceite y vino; y haciéndolo montar su propia cabalgadura, lo llevó a una posada y cuidó de él. Al día siguiente, sacando dos denarios, se los dio al posadero y dijo: “Cuida de él y, si gastas algo más, te lo pagaré cuando vuelva.”… ¿Quién de estos tres te parece que fue prójimo del que cayó en manos de los salteadores?» Él dijo: «El que practicó la misericordia con él.» Entonces Jesús le dijo: «Vete y haz tú lo mismo.»

Mensaje pastoral

¿Quién es mi prójimo?

La personalidad del hombre se define conforme a su reacción a su entorno, es decir, según su relación con el prójimo que Dios le pone en el camino. Estas relaciones sociales no forman meramente una parte de la vida sino que instituyen el sentido real de la misma; es menester enfatizarlo hoy en día, que el individualismo se ha vuelto la dignidad principal de la sociedad.

La pregunta que le preocupaba al legista de la lectura evangélica no es fácil de contestar: «¿Quién es mi prójimo?», al que tengo que amar como a mí mismo y cuya vida ocuparía de mi reinado un espacio significativo tanto cuanto la mía.

Para el judío de aquel entonces, merece este calificativo el hermano, el familiar o el judío, tomando en cuenta que en su concepto la religión equivale a la raza. El hombre contemporáneo también define «el prójimo» conforme a la ideología religiosa, política o nacional y, sobre todo, conforme al interés común.

La parábola de Cristo «el Buen samaritano», en cambio, establece la respuesta concluyente del Cristianismo sobre «el prójimo» en el siguiente término: ¡Amor!

Amor comprometido y expresado en misericordia; amor práctico incapaz de encerrarse insensiblemente lejos del entorno. ¿Qué significa la familia y la hermandad cuando el amor se opaca? ¿Qué figura la patria si el sentido de la responsabilidad se desvanece? Todas las relaciones en ausencia de amor vuelven redes que cautivan lastimosamente la individualidad de hombre a escapar. «Vete (hacia el prójimo) y haz tú lo mismo (que el buen samaritano)», dijo el Señor al legista. El prójimo es aquel hacia quien me dirijo. Cada hombre que se encuentra en mi ruta es mi prójimo: o me dirijo hacia él con misericordia o lo ignoro y así lastimo la proximidad.

Las garantías de la vida no se consiguen ignorando al prójimo sino sirviéndolo, porque la garantía está en Dios y no en el hombre. No hay comunión con Dios sin el amor al prójimo. No hay comunión con Dios en un corazón que no se apiada.

La familia, la raza y la patria son relaciones establecidas que ayudan pero lo que crea a una «prójimo» es el salir hacia él con misericordia.

«Vete (salte) y haz tú lo mismo».

San Juan Crisóstomo (13 de noviembre)

El más grande y amado entre todos los oradores cristianos, San Juan Crisóstomo, nació en Antioquia la Grande entre los años 344-347; provenía de una noble familia, sus padres fueron Secundo, funcionario civil en la administración militar de Siria, quien muere poco tiempo después del nacimiento de Juan; y Anthusa, una excelente mujer y una cristiana ejemplar, viuda a la edad de veinte años, quien se hizo cargo de la educación piadosa y esmerada de su hijo, así como de su primera hija. Juan recibió su enseñanza literaria del filósofo Anthragathius y de Livanio, el sofista, quien fuera el más grande maestro de la escuela retórica griega en aquel tiempo. Livanio era pagano, y cuando le preguntaron antes de su muerte a quien consideraba su mejor sucesor, contestó: “Por supuesto a Juan, si los cristianos no lo hubiesen separado de nosotros,” y sobre la madre de Juan opinó: “¡Qué dignas mujeres tienen los cristianos!”

Después de terminar sus estudios, Juan ocupó el puesto de abogado y se hizo muy famoso por su elocuencia. Pero muy pronto la vida mundana lo aburrió. Al recibir el bautismo a la edad adulta, según las costumbres de aquellos tiempos, quiso alejarse al desierto, pero se quedó en la ciudad por petición de su madre.

Mientras tanto el obispo de Antioquia, Meletio, se enteró de su extraordinaria inteligencia y lo ordenó lector en el año 370. En este tiempo Juan estaba estudiando las Sagradas Escrituras y otras ciencias relacionadas con la teología.

Al fallecer su madre, pudo cumplir su más gran deseo. Del año 374 al 381 vivió vida monástica en una ermita cerca de Antioquía; su extremo ascetismo minó su salud obligándolo a regresar a Antioquía, donde San Meletio lo ordenó diácono en el año 381.

San Meletio fue llamado a Constantinopla para presidir el Segundo Concilio Ecuménico durante el cual se durmió en el Señor. En el año 386 el obispo Flaviano ordena a Juan presbítero de la Iglesia de Antioquía. Los doce años de su servicio en Antioquia fueron los años más felices de su vida. Predicaba sin parar y participaba de manera muy activa en las alegrías y tristezas de sus parroquianos. Muchas veces sus sermones eran interrumpidos por fuertes aplausos. Juan calmaba al público diciendo: “¿Para qué me sirven sus aplausos? Arrepentimiento y conversión de vida hacia Dios, son los mejores elogios para mí de parte de ustedes.” Especialmente Juan se hizo famoso por sus palabras referidas a las desgracias que amenazaban a la gente de Antioquia por derrumbar las estatuas de los emperadores. Muy pronto, en todo el mundo cristiano Juan se hizo famoso como “El Crisóstomo” (Boca de oro) (este nombre le fue dado por su gran elocuencia). Dada su fama, fue elegido por el pueblo como sucesor de San Nectario –quien a su vez había sucedido a San Gregorio el Teólogo-; y fue consagrado obispo de Constantinopla el 28 de febrero de 398 por Teófilo, Patriarca de Alejandría.

Los primeros tiempos de su patriarcado fueron muy agradables para Juan: empezó a luchar con todas sus fuerzas contra lo que quedaba del arrianismo, por establecer la paz entre algunos obispos que estaban en conflicto y por corregir al clero y a los parroquianos. Pero esta enérgica actividad le trajo muchos enemigos, la más importante de entre ellos, la emperatriz Eudoxia, quien encabezaba la lucha contra Juan. Eudoxia era una mujer frívola y ambiciosa, había atraído a su grupo al arzobispo Teófilo y junto con él se unieron los obispos descontentos con Juan. Estos obispos organizaron un concilio en una ciudad cerca de Calcedonia llamada la Encina en agosto del 403 y condenaron a Juan a dejar la cátedra y al exilio en el Ponto.

“La iglesia de Cristo no comenzó conmigo ni terminará conmigo” — les dijo Juan a los fieles y dejó la capital. Pero la misma noche hubo un terrible terremoto y sus golpes más fuertes se escucharon en el palacio. Asustada Eudoxia mandó pedir al Crisóstomo que regresará a la ciudad. Pronto el ambiente de reconciliación se transformó en nuevos enfrentamientos con Eudoxia. Pasaron dos meses y Eudoxia se entregó nuevamente a sus pasiones y vicios. En la fiesta de San Juan Bautista, el Crisóstomo inició su sermón con estas palabras: “Ya se enfurece nuevamente Herodías, nuevamente se conmueve, baila de nuevo y nuevamente pide en una bandeja la cabeza de Juan”. Sus adversarios consideraron estas palabras como una alusión a Eudoxia. Esta vez Juan fue condenado por rebeldía y fue enviado al exilio a Cucusa en el año 404, en la frontera de Cilicia y Armenia, adonde durante tres años acudían desde Antioquía muchos de sus antiguos fieles, por lo que sus enemigos decidieron desterrarlo a Pitio, lugar inhóspito cerca del Cáucaso.

El arduo viaje de 3 meses estuvo lleno de contrariedades y sufrimientos; los rudos guerreros llevaban al Santo caminando a través de las montañas con calor y lluvia torrencial. El Santo no alcanzó a llegar a Pitio; entregó su alma al Señor cerca de Comana, en el Ponto, en la capilla del Mártir Basilisco, donde durante la noche, tuvo la visión del Santo Mártir, quien le dijo: “No te entristezcas, hermano, mañana estaremos juntos.” Al día siguiente, por la mañana, después de comulgar los Santos Dones, y de pronunciar las palabras: “¡Gloria a Dios por todo!” San Juan falleció en paz el 14 de septiembre de 407.

Sus santas reliquias fueron trasladadas a Constantinopla 31 años después por el Emperador Teodosio el Joven y Santa Pulqueria. Los hijos de Arcadio y Eudoxia con fervientes suplicas pidieron perdón por los pecados de sus padres; el retorno de estas santas reliquias es celebrado el 27 de enero. El Crisóstomo hizo exhaustivos comentarios sobre las Sagradas Escrituras y es el autor con más número de obras entre los Padres de la Iglesia. Nos dejó comentarios sobre todo el libro del Génesis, los Evangelios de San Mateo y San Juan, Hechos de los Apóstoles y sobre todas las epístolas de San Pablo; 1447 sermones y 240 epístolas. Junto con esta conmemoración y la del 27 de enero, se le conmemora con los jerarcas de la Iglesia Basilio el Grande y Gregorio el Teólogo el 30 de enero.

NOTICIAS

Comunicado del Santo Sínodo

Convocado por Su Beatitud el Patriarca Ignacio IV, el Santo Sínodo Ortodoxo Antioqueno, presidido por él, realizó su 48ª Sesión ordinaria, del 25 al 27 de octubre, 2011, en la Sede patriarcal del Monasterio de Nuestra Señora del Balamand (Líbano) … (más).

 

Caracas: Recepción a S.E. Obispo Ignacio

La comunidad de la Catedral de San Antonio Abad en Caracas, venezuela junto con su párroco, el Rev. Archimandrita José Dib, organizó el día 29 de octubre una recepción a Su Exelencia Obispo Ignacio Samaán … (más)

Cosagración episcopal: dos obispos auxiliares en Sao Paolo

El domingo 6 de noviembre, se llevó a cabo en la Catedral patriarcal la consagración episcopal de Sus Ecelencias, Monseñor Romanos Daoud y  Monseñor Marcos El-Khoury, como obispo auxiliares … (Más)

 

Comunicado del Santo Sínodo

48ª Sesión del Santo Sínodo del Patriarcado de Antioquía
De la Iglesia Católica Apostólica Ortodoxa
 Monasterio de Nuestra Señora de Balamand (Líbano) El 27 de octubre de 2011
Comunicado Emitido por la Secretaría del Santo Sínodo

Convocado por Su Beatitud el Patriarca Ignacio IV, el Santo Sínodo Ortodoxo Antioqueno, presidido por él, realizó su 48ª Sesión ordinaria, del 25 al 27 de octubre, 2011, en la Sede patriarcal del Monasterio de Nuestra Señora del Balamand (Líbano); y con la participaron de los Señores Arzobispos: Spiridón (Khoury) de Zahle y Baalbek; Georges (Khodr) de Jbail, Batrun y dependencias; Youhanna (Mansour) de Latakíeh; Elías (Aude) de Beirut; Elías (Saliba) de Hama; Elías (Kfoury) de Tiro, Sidón y Marjioun; Antonio (Chedraoui) de México; Damaskinos (Mansour) de San Paulo y el Brasil; Sabbas (Esper) de Bosra, el Monte Árabe y Horán; Georges (Abou Zajm) de Homs; Boulos (Yaziyi) de Aleppo y Alejandrina; Siluan (Muci) de Argentina; Youhanna (Yaziyi) de Europa; Basilio (Mansour) de Akkar; Efram (Kiriakos) de Trípoli y el Cura, Nifón (Saikali) Representante Patriarcal ante la Sede de Moscú; Obispo Gattas (Hazim), Abad del Monasterio de Nuestra Señora de Balamand y decano del Instituto Teológico San Juan Damasceno y el Ecónomo Georges Dimás como anotador del Sínodo.

La sesión actual del Santo Sínodo Antioqueno se realiza, en tiempos de acontecimientos muy delicados que transitan los países pertenecientes a la Sede Antioquena y los del Oriente Árabe, y especialmente Siria y el Líbano, donde los ortodoxos son los más numerosos entre los cristianos.

Se inició el Sínodo con la palabra de bienvenida por parte de Su Beatitud el Patriarca Ignacio en la que ha puesto énfasis sobre la importancia de la unidad de la Iglesia Ortodoxa Antioquena en Siria, el Líbano, los países de Oriente y en la diáspora; y sobre la prioridad de obrar para dar respuestas a sus hijos quienes, junto a sus conciudadanos, enfrentan muchos problemas y desafíos. Además, Su Beatitud puso ante los Señores Arzobispos congregados, los resultados de las densas reuniones que ha realizado en el Líbano, para la organización de la Comunidad Ortodoxa
allí, para que ésta tenga su merecido lugar en los círculos de la decisión tanto políticos como administrativos.

Partiendo de una misma orientación de fe con respecto a la presencia cristiana activa y en un testimonio auténtico de los cristianos, al Santo Sínodo le importa afirmar el rol de la Iglesia como conciencia de todos los fieles, por ello, hace recordar siempre de la voluntad de Dios por el
bien de la humanidad. De hecho, la Iglesia no puede quedarse quieta ante lo que están padeciendo los pueblos y las comunidades de injusticia y discriminación.

Y partiendo de la premisa que la Iglesia Ortodoxa se encuentra presente en estos países desde el anuncio de la fe cristiana, y en base al rol de vanguardia que los ortodoxos han ejercitado a través de los siglos en pos del desarrollo de sus países en lo nacional, y cívico-cultural, los Padres del Santo Sínodo convocan a sus hijos a participar efectivamente en la búsqueda de soluciones eficaces, a fin de salir de la crisis actual y emprender el camino de la prosperidad y progreso de sus países.

Los Padres del Sínodo se han detenido ante el proceso de los cambios políticos que devastan la región, y ruegan a Dios que inspire a los responsables del destino de los países de la región, para que tomaren las decisiones adecuadas, las que pueden aliviar las dolencias de los ciudadanos, mejorar la condición de vida y asegurar un futuro próspero a sus hijos; y con este fin, el Sínodo afirma:

  1. Trabajar con confianza y esperanza para la paz, la justicia social y la edificación de un gobierno de ciudadanía, basado en la equidad de todos en los derechos y obligaciones, bajo la protección de una misma ley, a la que se someten todos los compatriotas sin discriminación.
  2. Los miembros de la grey ortodoxa se mantienen firmes y ligados a sus tierras mediante la solidaridad comunal y social, entre las parroquias -de la Iglesia en todo el radio del Patriarcado- en la tierra madre y en la diáspora

Asimismo, el Santo Sínodo estudió varios asuntos internos de las que destacamos:

  1. Los Reglamentos Internos en la Sede Antioquena: Afirmando la necesidad de que estos reglamentos deben inspirarse del principiode la unidad del pueblo, quien se ampara por los sacramentos,  alrededor de sus pastores, a fin de ofrecer un culto agradable al Dios, y recordando de la necesidad de ejecutar estos reglamentos, cuyo objetivo principal es asegurar las oportunidades de participación de todos los fieles, cada uno según los dones recibidos, de modo que todos sean participes en la planificación de la labor eclesial, y de su enrolamiento para su ejecución y en asumir las responsabilidades.
  2. La Situación Pastoraly la necesidad de su reglamentación: los acontecimientos que el mundo está contemplando en lo que se refiere a lo tecnológico incita la Iglesia a tomar posiciones nuevas en lo Pastoral, lo que sobrepasa las formas establecidas y, a adoptar métodos avanzadas, que ayudan a los fieles para asegurar una vida honorable y el empleo de sus energías en la vida pública. En este contexto, quizás establecer unas instituciones productivas sea uno de los medios pastorales que arraigara los miembros de la comunidad en su propia tierra; así también las instituciones educativas y sociales, las existentes o las que están por formar, deben asegurar, además de las oportunidades laborales, espacios en los que la Iglesia da un testimonio, por la particularidad de su servicio y amor al mundo.
  3. La realidad de los medios de comunicación eclesiásticos: Es esencial que los medios jueguen un papel importante y fundamental en la consolidación de la interacción y la colaboración entre la Iglesia y el mundo. Y para que los medios sean interactivos, deben dar lugar para comunicarse, para conocer la verdad de la situación hoy, y lo que agita a la sociedad actual de ideas y propuestas que interesan el porvenir de todos. Los medios de comunicación son importantes para establecer puentes de información y lazos en la misma patria, y entre las diversas sociedades y comunidades que forman la extensión antioquena. Por lo tanto, los Padres del Santo Sínodo hicieron hincapié sobre el rol universal de los medios eclesiásticos, y sobre la importancia de la iniciativa de la Iglesia en responder a las necesidades de las parroquias y la comunidad.

Y finalmente, el Santo Sínodo expresa su deseo a que los pueblos y los líderes del Oriente Árabe trabajen juntos para garantizar la estabilidad, la libertad y el futuro prometedor de esta región; así también a que la grey ortodoxa desempeñe su rol activo en este sendero.

Compartir
Compartir